Capbreton (Francia). Viernes 5 de agosto de 2016.
Cuarta y última etapa a través de Las Landas (undécima del viaje), con 3 paisajes diferentes.
El primero de ellos, entre Saint-Julien-en-Born y Léon, nos muestra la profundidad de los típicos bosques de la zona, entre pinos y helechos, sobre un manto de arena en un terreno ondulado por el que transcurre una pista ciclable para recordar.
La señalización de la Velodyssee en esta zona es muy buena, coincidiendo aquí con señales del camino de Santiago del litoral.
Si embargo, en las ciudades la señalización es muy escasa o brilla por su ausencia, por lo que en entornos urbanos tendremos que estar muy atentos a nuestros mapas o GPS.
En el lago-estanque de Léon encontramos un lugar ideal con merenderos donde detener el tiempo, para comer contemplando sus aguas y las embarcaciones deportivas que sobre el navegan.
El segundo tramo, que nace en Léon y se prolonga hasta Soustons, es un impresionante carril bici junto a pequeños pueblos y partes de bosque, con enormes rectas, por el que transitan cientos de ciclistas y patinadores de todos los tipos y edades, y que te envuelve en un clima idílico que te hace olvidar el tráfico a motor de las carreteras y ciudades.
El tercer y último tramo de esta etapa, transcurre por carril bici junto a carreteras transitadas que llevan a la turística ciudad de Capbreton, la cual posee varios kilómetros de playa.
Como viene siendo habitual en la zona, los campings son muy caros y suelen estar completos, por lo que para encontrar alojamiento en alguno de ellos se han de visitar varios. Es aconsejable, para aquellos que no transitan por la zona en un viaje largo, que los omitan y busquen otro tipo de alojamientos con antelación.
A partir de aquí dejaremos «la côte landaise» para entrar en «la côte basque», y conocer ciudades como Bayonne, Biarritz o St-Jean-de-Luz.
¡Muchas gracias por seguirnos!
Abrazos,
Beni y María.