Séte (Francia). Lunes 25 de julio de 2016.
Con la música de los instrumentos de viento y de percusión de una banda, en la celebración del día de Santiago, en la barriada que lleva su nombre, nos despedía Irun esta mañana.
Habíamos madrugado en previsión de los controles aduaneros en el puente de Santiago, sobre el rio Bidasoa, que separa Irun de Hendaya haciendo de frontera entre España y Francia, pero éstos no nos supusieron ningún retraso.
Tras cruzar España de sur a norte en autobús el día anterior, cruzar Francia de oeste a este en tren, con las bicicletas y el resto del equipaje, no iba a ser tarea fácil.
Nuestro billete de Hendaya a Séte, comprendía dos trenes distintos y por tanto un trasbordo (en Burdeos). El primero era un TGV, en el que tuvimos que empaquetar nuestras bicicletas (ruedas delanteras quitadas y colocadas al lado, manillares torcidod, sillines y pedales quitados, envueltas en una funda ligera de naylon de coor negro) y que por suerte tomamos en el inicio de su trayecto (espacios para los equipajes vacíos). El segundo era un Intercites, en el que tuvimos que realizar lo mismo. Hay que decir que por internet no puedes reservar espacio para tus bicicletas y que cuando lo fuimos a hacer estaa mañana en la estación ya estaban agotados, por ello el empaquetamiento.
El transbordo es el momento mas duro en un viaje en tren con bicicletas y equipaje. El tren te deja en un andén entre dos vías, de muchas, y sólo 20 minutos antes las pantallas muestran en que vía tendrás que coger tu siguiente tren. Si añadimos la ausencia de ascensores, e incluso de rampas, y la presencia de empinadas escaleras que bajar y subir para moverte de uno a otro andén por debajo de las vías, tenéis la respuesta al porqué es tan complicado.
A media tarde llegamos a Séte, bonita ciudad con canales que conectan con el mar Mediterraneo, en la cual comienza mañana nuestra primera etapa a lo largo del Canal du Midi en la que conoceremos la región de Languedoc-Rosellón.
A lo largo del día hemos podido observar cómo este país en el que conviven tantas culturas de manera admirable trata de seguir la vida con normalidad, pese a los graves sucesos ocurridos recientemente. La información e instrucciones ante posibles atentados terroristas es una constante que está presente en las pantallas de los lugares públicos, y que llama la atención estos días.
¡Muchas gracias por seguirnos!
Abrazos,
Beni y María.